junio 11, 2006

Se Arrienda


Hace un tiempo vi ‘Se Arrienda’, bastante tarde, considerando que dio que hablar a fines del año pasado, fueron miles las tentativas para verla (juntarnos, recomendármela, en el Cine Arte Alameda por harto tiempo en cartelera, el día del cine, en fin, miles); pero insisto en aquello de que "me ocurran cosas, modestamente excepcionales", es la frase de Rayuela que me persigue siempre (porque no sé si la vida es realmente genial o soy una persona especialmente sensible a esos temas [el otro día vi el video de ‘nada de esto fue un error’, con la Julieta Venegas, en el metro, y me maté de la risa]). La cosa es que ‘Se Arrienda’ llegó en el momento preciso, como que me había sido esquiva anteriormente porque ‘era necesario’ que la viera exactamente cuando la vi, para cerrar esa semana en que no sé que había pasado y me aburrí y decidí que ya no más y que punto final y resulta que me encuentro con Gastón y la vida solitaria de Gastón y el chocar contra el mundo y darse cuenta de que no es tan bonito como lo pensó unos 10 años atrás.
Fuguet no me cae bien, literariamente no lo conozco, pero me carga, porque es como el gringuito, que llega a Chile y se la compran todas y, como tanto, que además pueda hacer una película (digo, alguien no puede resultarle todo y me da pica y me cae mal). Pero me cerró la boca, no porque ahora me caiga bien (o capaz, guapo lo he encontrado siempre y ningún guapo puede caerme mal), sino porque me hizo muy bien su película (no creo que vaya a ser por otras razones, lo ególatra y auto referente no me lo quita nadie), no solo por la temática (nunca le di la lectura del ‘bienvenido al sistema’), sino que porque está hecha con buena intención, está hecha para ser muy linda, sin pretender ser la gran película y consigue eso que decía el coguionista, salir con una sonrisa en la cara al terminar de verla.

Y es que trata de la GCU (gente como uno), no se exacerban las características extrañas y medias oscuras de nadie, ni se centra en un estilo de vida que los actores no conocen; leía una crítica que decía que era una película que retrataba a la clase media, no sé si es tan así, pero si tengo claro que retrata a una persona media, para quien la depresión es una incomodidad con uno mismo, que no tiene tendencia ni al suicidio ni a alguna patología extraña, que se viste con jeans y polera, que se junta los viernes a tomar algo después de la semana, que se manda uno que otro condoro de vez en cuando, pero nada tan grave (y en realidad, nada es tan grave), en fin, que espera que, alguna vez ocurra algo, un milagro, no muy excepcional, pero que venga a ponerle un poco de sabor a la cosa, porque es gente cotidiana, que disfruta de la cotidianeidad, hasta que aparece una Elisa y un ‘es largo, tienes tiempo?’ y un ‘si, claro’.

No sé si es tan buena, pero es una película bella y eso se agradece.



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3 Comments:

Blogger Gabriela said...

Yupi!!!, se puede comentar.
Yupi!!!, al fin un respiro...

(Eran tan ricos los jugos yupi, aunque más ricos son los caricia).

Si, es genial eso, que las cosas pasen cuando tienen que pasar -o sea no es genial cuando aún no ocurren, sino cuando ocurren-. Pero lo más genial es encontrar películas que gusten, y simplemente disfrutar del respiro que nos da la vida.

Bueno, cuidate mucho y descansa todo lo que te sea posible.

Saludillos^-^

lunes, junio 12, 2006 10:10:00 a. m.  
Blogger Gabriela said...

P.S:De Fuguet lo único que he leido es "Sobredosis", y en su tiempo fue desesperante...

Eso^-^

lunes, junio 12, 2006 10:12:00 a. m.  
Blogger Carlo said...

HAsta que cambiaste el fondo... todos los cambios son buenos, dicen algunos, yo me quedo con la transitividad, es más cómoda, aparte que el hecho mismo de cambiar me da miedo, por lo que le tengo pavor a ciertos cambios. Pero hay cosas que cambian, y otras que no.

Bueno, debo ver esa película, siempre hablas de ella, te volviste loca. Pero me ha entrado el bicho, y no sé que hacer.

Podríamos juntarnos un día a verla, y ¿qué sé yo? Eso si, después de clases. Y es que Procesal me robó la vida, si estoy un fin de semana largo estudiando, algo que me dije a mi mismo que nunca haría, bueno, la incongruencia hecha persona, el "inconsecuente por naturaleza".

Vuelvo al estudio.

Un abrazo, amiga, y espero que todo marche sobre ruedas.

Y, juntémonos a verla!!

Carlo.

lunes, junio 12, 2006 3:26:00 p. m.  

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