mayo 20, 2007

La tierra tira.

Últimamente he sido presa fácil, más de lo normal, de la nostalgia; pero no de gente ni de circunstancias, ni de proyectos frustrados, porque eso implica pensar y para pensar hay que tener tiempo; sino que de paisajes, de prender la tele y pasar por canales como canal trece cable y encontrarme con esos programas de deportes extremos en la playa o en los ríos, o al sur de mundo o ese programita que era tan bueno y que el torbellino de la “televisión moderna” se llevó, hablo de ‘visiones’; o de meterme a los archivos con fotos y encontrarme con imágenes del sur y del verano y de poder dormir y leer y hacer body y salir y sin tener que responder al lunes siguiente con gente que le pide a una que responda o con pruebas que le exigen a una andar un poco más alerta de lo que naturalmente anda.

Hoy vi play (me tiré la mañana entre dormir y ver play, porque estoy aburrida de no poder hacer lo que quiero hacer) y la Carmen (creo que así se llama la protagonista) le decía a su pinche que toda la gente que decía que el sur era genial era gente que iba un fin de semana y se venía, pero que era distinto pasar encerrado todo un invierno, con frío y esperando que pase la lluvia. Créame que sonaba tan idílico (quizá porque ando con depresión endémica), a pesar de que es lo mismo que me dice mi papá cuando le digo que me quiero ir a vivir a Conce, pero al campo, así como a Hualpén o Santa Juana.

El punto es que estoy agotada, como dije, aburrida de no poder dormir, ni pasar una tarde escuchando música, sin poder juntarme con mis amigos, ni terminar de leer a Kundera, porque está civil o laboral o procesal o comercial o civil de nuevo (que, menos mal, me gusta, aunque sea lo único que me gusta) que no me deja dividir el átomo y me vienen los recuerdos y esa cosa rara que se instala en la garganta cuando me veo encerrada y recuerdo que existe tanto mundo allá afuera... y no necesito tanto mundo, sino que irme un par de kilómetros y sentir frío con una salamandra o una cocina a leña al lado y encerrarme a esperar que pase la lluvia.



Tarde de Febrero de 2006.
Punta de Lava Pies, VIII región.
(que me recuerda a Curanilahue de 2007, cuec!, ya van 6 meses)

4 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Descubri este blog por casualidad, pero mas que todo por curiosidad.
He leido algunos de tus comentarios y muchos me identifican.
Creo que lo que sientes no es nostalgia, sino que no simplemnte no acepatar las responsabilidades que conlleva el crecer...
Maria Eugenia

lunes, mayo 21, 2007 11:00:00 a. m.  
Blogger Preto said...

Cuando veo fotos medias artisticas de viejos puentes en el sur y leo los comentarios de la gente que encuentra taaaan lindo el paisaje, pienso de inmediato en la gente que vive allá todo el año y tiene que atravesar ese precario puente en invierno con un temporal encima y a cero grados. Con las casas de Valparaíso me pasa algo parecido.

Pero nada me quita las ganas de vivir en el sure alguna vez. Por cierto, no soy de los que va por un fin de semana y ya. He pasado algo más de una semana cada vez que he ido por trabajos de invierno de la universidad. Y llegar a esas casas del sure y disfrutar del calor de una estufa a leña es impagable.

Idealización dirán... al cuerno.

lunes, mayo 21, 2007 3:27:00 p. m.  
Blogger Lala said...

por k cada vez que la gente dice sur, pienso en mi casa??
se me lvida que para santiaguinos varios, Temuco, Concepción y todo eso es Sur XD
por un momento me emocioné y pensé k hablabas de Punta Arenas.

depresión?? este clima deprime a cualkiera
cuidate!

jueves, mayo 24, 2007 4:35:00 p. m.  
Blogger Carlo said...

Uffff, mejor al próximo año no me voy a vacacionar, así durante el año no tengo buenos tiempos que recordar.

Y esta U, que nos carcome poco a poco, pero con tal confianza, al final, va a terminar por matarnos, y reanimar a ese abogado que llevamos adentro.

Un beso, amiga.

Y vamos que podemos!

Carlo.

sábado, mayo 26, 2007 6:50:00 p. m.  

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